|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
PANTOMIMA CABARETERA
Película "Burlesque".
J. G.
(Madrid,
España)
|
|
|
|
Ficha Técnica |
Video |
Banda sonora |
|
|
La historia se repite con pereza imaginativa. La fama y fortuna están a la vuelta de la esquina; el ambiente de las bambalinas envuelto entre celofán acaramelado por la voz de Christina Aguilera. Querer comerse el mundo para caer en el desengaño redentor. Un metraje repleto de coreografías instaladas en el vídeo.
Una mezcla de “Mouline Rouge”, “El bar Coyote (Coyote Ugly)” y “Fama” bajo la magia de una música mimetizada noche tras noche. Recuerdos de “Striptease” (Andrew Bergman, 1996) y “Showgirls” (Paul Verhoeven, 1995).
El sueño americano de cazar una oportunidad. Fuerza vocal y carne femeninas descubren un mundo cegador donde resulta fácil perder el norte. Cher gritando angustia propulsora de un final dramático, convirtiendo lo trágico en relleno indigesto. |
|
|
|
|
|
Dar círculos en un elíseo glamuroso para conseguir un todo que pronto sucumbirá ante la ignorancia de una mente primeriza y fácil de encandilar.
El aburrimiento se pasea por el sendero de lo fácil bajo un manto de silicona danzarina y chispa juvenil.
El director Steve Antin se ha rodeado de dos iconos musicales para desarrollar este proyecto grotesco.
Cher (Tess), amante del retoque estético, no sorprende. A sus 64 años sigue divina, como se dice en las tertulias del corazón. Envuelta en formol, porcelánica y de silueta apolínea, asusta la potencia de su voz.
La lozanía de Christina Aguilera (Ali), mezcla de sabias ecuatoriana e irlandesa, regala una nueva visión al escenario: experiencia y juventud cinematográficas en una relación adoptiva. |
|
|
|
|
|
Cher es alma de cabaret, su sonrisa profiláctica pertenece más a la comedia estudiada que al drama, como se ha calificado a la película de Steve Antin. Es un espejismo, una figura trasparente empaquetada por el cuero de su vestuario, una barbie madura mimada por las cámaras. Los escasos primeros planos desvelan su vejez sustantiva. Los focos apenas se acercan unos metros a una figura que puede derretirse con el calor de las luces, y cuando lo hacen, las patas de gallo quieren respirar entre los potingues que disimulan el paso del tiempo. Meritoria es la dirección fotográfica de Bojan Bazelli, cuidándose de oscurecer las luces cuando la cercanía visual entre la actriz y el espectador se hace patente.
La mirada de Cher sigue siendo igual de pícara, y rasgada, con unos labios carcomidos por el botox y un cuerpo alejado de la celulitis. Es una “Madame” a quien no le gusta ser definida como tal, un capitán dispuesto a hundirse con su barco del placer. |
|
|
|
|
|
La voz de Christina Aguilera otorga una dimensión estelar al espectáculo. El enfoque inicial a revista musicada toma un cariz de sofisticación bailarina.
El aroma francés que despide la palabra cabaret va mutándose en el pelaje de Las Vegas, menos señorial: acrobático.
Contorsionistas, barmans, stripers, anfitriones andróginos (Alan Cumming), estilistas saltarines entre ojales y camas ajenas (Stanley Tucci), Can Can, príncipes azules (Cam Gigandet), disfraces, play-backs, números musicales... En “Burlesque”, la realidad se muestra bajo la máscara del espectáculo pasajero. |
|
|
|
|
|
La representación debe continuar con la intención de “Burlesque” de convertirse en DVD musical, alejado del espíritu cinematográfico.
Lo burlesco de Steve Antin es un videoclip para lucimiento de Christina Aguilera. Lejos de recordar la inspiración en el post-impresionismo de Toulouse Lautrec, “Burlesque” cultiva su filosofía en el frío star-sytem americano. |
|
|
|
|
|
|
|
|
|
La
revista Photomusik no se hace responsable
de las opiniones de sus colaboradores
expuestas en esta sección.
Texto: www.photomusik.com
©
|
|
|
|
|
| | |