Entrada a nuestra tienda
To our shop

flecha
Home

 
 
PHOTO

USIK

 

Buscador interno

Loading
pto

.MENÚ
.ZONA GRÁFICA

puntoConcierto 1
puntoConcierto 2
puntoConcierto 3
puntoConcierto 4
puntoRecuerdo 1
puntoRecuerdo 2
puntoBiografías
puntoPasaron
puntoReportajes
linea puntos
ZONA AL DÍA

puntoAgenda
linea puntosAgenda Clásica
linea puntosNoticias
linea puntosNovedades
linea puntos
.ZONA DE OPINIÓN
puntoPágina del Musinternauta
puntoEntrevistas
puntoFrases musicales
puntoCine y espectáculos
linea puntos
.ZONA DE CLÁSICA
linea puntosAgenda Clásica
linea puntosBiografías
linea puntos
.ZONA DE CONTACTO
puntoForo
puntoDe interés social
puntoEnlaces
puntoNewsletter
puntoTIENDA
linea puntos
.ZONA DE OCIO
linea puntosGraffitilandia
linea puntosAnecdotario
linea puntosChistes musicales
linea puntosLetras de canciones
linea puntosJuegos
linea puntosMúsica y salud
linea puntosRADIO
linea puntos
.ZONA DE DESCARGAS
puntoSalvapantallas
puntoProgramas
puntoTonos musicales

pto

 

 



 

CINE Y ESPECTÁCULOS
CARTELERA CULTURAL
Histórico
 
 
 


ESPAÑOLADA EN TIEMPOS MODERNOS
Película Poliamor para principiantes


J. G.
(Madrid, España)

Poliamor para principiantes
Ficha Técnica Video    
Tan fácil es arrancar un orgasmo a una piedra como sacar una carcajada de una película que presume de celebración orgiástica. Este festejo no abandona la comedia gracias al grado de intelectualidad hortera divertida, de la que Paco León sabe mucho, con la ayuda del lenguaje. En la cinta del director sevillano se daba rienda suelta a las filias sexuales como dacrifilia, elifilia o somnofilia. La riqueza lingüística de Poliamor para principiantes es insufrible y, por qué no decirlo, pija. La variedad de Kiki, el amor se hace emerge ahora como un vocabulario de circuito cerrado donde las puertas están abiertas a la experimentación con los efluvios sensuales de un sentimiento atocinado. Aquí reside la fuerza de una idea incapaz de vender humo porque no enciende mecha alguna, sin lecturas dobles. La ligereza de la diversificación amatoria busca provocar la curiosidad del profano, entre los que me incluyo y meto también a Satur y su hijo Manu, un chaval talludito que aún duerme arrullado bajo el techo familiar. Esto sí es un problema (que pasa desapercibido) en un nido carente de precariedades económicas. Se tiene una visión del mundo distorsionada por gafas de Realidad Virtual. Tampoco importa lo suficiente que los progenitores deseen la soledad del lecho conyugal. El hijo es un personaje de chiste, amante de los superhéroes, forofo de los tebeos y defensor del amor a la antigua usanza. Nada es normal en este núcleo donde el poliamor acerca a las personas mientras se descubren sensaciones escondidas, hasta ahora, en la cueva freudiana del la represión mental.
El amor se reinventa por necesidad generacional aunque padre e hijo explotan, con intenciones monetarias, un filón entre zarpazos de polémica amarillista. Se encumbra a las audiencias nuevas a través de las formas actuales que generan opinión con clics impulsivos. Las relaciones humanas son tiras cómicas con efectos Marvel, disfraz de Power Ranger y bocadillos de viñeta que dan color a la estética pop de un universo irreal.
 
Satur (Karra Elejalde) y su hijo Manu (Quim Àvila) en el parque oyendo hablar de eso que llaman poliamor  
Manu en su dormitorio convertido en fortaleza empapelada con dibujos de héroes fantásticos: un mundo particular y alejado de la realidad

Términos como unicornio, heteropatriarcado o relación abierta se conjugan alegres junto a otros acrónimos menos usuales tipo ADF (Acuerdo de Fluidos), ENR (Energía de la Nueva Relación) para rellenar un lenguaje Hare Krishna del siglo XXI. Otros, llámense cocrianza, ensalzan la sociedad poblada de mascotas, proponen un núcleo parental descentralizado mientras se tacha al patriarcado como propuesta conviviente. El batiburrillo de palabros y situaciones poliamorosas acercan lo transgénero a la pasarela, identifican al modelo fotográfico con el cachas hipócrita. La aparición de celos apuntan al cambio en un entorno nuevo donde una parte ha de gestionar sus arrebatos con temple emocional. La liberación de prejuicios y las ganas de tantear el amor en entornos desconocidos se distancian del humor placentero que quiere gozarse en grupo. Karra Elejalde es un monstruo de la interpretación, capaz de meterse en el drama y el disparate de la pantomima insustancial. Los enredos cansan para demostrarnos que la fama no lo es todo. Este estímulo a la ligereza y el aburrimiento made in Spain busca el amor libre que perseguía José Luis López Vázquez en sus años de baby boom. El cine español sobrevivirá si prescinde de este largometraje en su catálogo.

J. G.


La revista Photomusik no se hace responsable de las opiniones de sus colaboradores expuestas en esta sección
.
Texto: www.photomusik.com ©
<< 2020       < anterior          siguiente >       2022 >>

© Copyright Photomusik.com