El activismo ecologista se enfrenta al militarismo político y económico. Los dos factores tienen la capacidad de mejorar las cosas. Cuando dejen de ir por libre se convertirán en motor social. La unidad lograda en
“Una aventura extraordinaria” ayudó a evitar una tragedia. La vida de una familia de ballenas grises depende tanto del coraje individual como de la labor colectiva de las personas. Drew Barrymore, en el papel de Rachel Kramer, representa esa vitalidad combativa; enfrentada a quienes se empeñan en anteponer los intereses económicos a los humanos.
En esta época de las telecomunicaciones, las noticias vuelan: primero como fugaces recortes para rellenar huecos informativos. Lo que surgió como una de estas coletillas se transformó en interés devorador de conciencia social. La soledad migratoria de las ballenas forma parte de los telediarios. La helada tranquilidad polar de
Barrow se convierte en un nido de avispas informativas buscando la primicia. La evolución de
“Una aventura extraordinaria” muestra un giro sobre el interés humano por una causa solidaria: la salvación de unas ballenas varadas, aupada por la repercusión política para convertirse en gancho electoral. La picaresca de los lugareños explota el suceso atraídos por su interés económico. La solidaridad mueve a las personas para que las vidas de estos animales vuelvan a la libertad.